Garbitania cifra en dos millones el coste de implantar el ‘puerta a puerta’ en Zarautz

Donostia. Garbitania, la empresa que gestiona los residuos puerta a puerta de Hernani, Oiartzun y Usurbil, comienza a asesorar a los 34 municipios que han mostrado su voluntad de implantar este sistema el próximo año. Y lo está haciendo mediante unos estudios de viabilidad que, en el caso de Zarautz, cifran el gasto anual de la implantación en 2,1 millones de euros. Sirva como ejemplo el análisis de este estudio, que sería exportable a muchos otros municipios en los que se plantea cambiar de sistema.

La empresa analiza la situación actual y plantea los beneficios que acarrearía, bajo su punto de vista, cambiar de modelo de recogida. Independientemente del sistema que se escoja, el tratamiento de los residuos urbanos continúa siendo un servicio deficitario pero, según Garbitania, el agujero que generaría el puerta a puerta sería menor. Según sus estimaciones, con el cambio, el déficit sería de 374.050 euros, 23.000 euros menos de lo previsto este año por el Ayuntamiento de Zarautz.

En la comparación de los gastos e ingresos de uno y otro, hay dos diferencias fundamentales. Por una parte, el puerta a puerta triplica el presupuesto de personal, con la contratación de 18 empleados, que costarían 805.000 euros (frente a los 4,5 trabajadores actuales). Y por otro, este modelo de reciclaje obligatorio, permitiría obtener más ingresos por la venta de materiales. El estudio de Garbitania estima que se podrían ingresar 535.513 euros por la venta del papel y de cartón a la empresa de reciclaje Ecoembes, cuando, según sus cifras, hoy solo se embolsan 5.100 euros por venta del cartón.

El estudio también hace referencia a los 516.000 euros que se deberían invertir en el municipio para habilitar las infraestructuras necesarias para el puerta a puerta. Concretamente, plantea la necesidad de comprar dos camiones para la recogida (297.000 euros) y los colgadores en los que se deposita diariamente la basura (150.000 euros), así como la construcción de un punto de transferencia en el que se tratarían los residuos (135.000 euros).

Con estos datos sobre la mesa, Garbitania procede a desgranar el coste que supone el modelo de los contenedores en Zarautz. Y concluye que, hoy por hoy, se gasta un millón en la gestión, 565.500 euros en personal y 383.600 euros en aportaciones a la mancomunidad, lo que suma un total de 1,95 millones de gastos.

Teniendo en cuenta que, tanto con el puerta a puerta como con los contenedores se ingresarían 1,5 millones por las tasas municipales que abonan los ciudadanos, Garbitania concluye que el puerta a puerta generaría un déficit de 23.000 euros menos.

Estudios previos Garbitania hace alusión a los otros dos estudios que analizaron previamente la posibilidad de implantar el puerta a puerta en la localidad de Zarautz. Y lo hace, para solventar las dudas que se pudieran extraer de esos documentos porque, a su juicio, los argumentos técnicos y económicos que utilizan “son muy debatibles”. El primer análisis data de junio de 2010 y fue encargado por la Mancomunidad de Urola Kosta a la consultora Idema, que comparó los beneficios del puerta a puerta y el quinto contenedor.

Por su parte, el segundo análisis lo hicieron FCC y Serbitzu, las empresas que se encargan de gestionar actualmente los residuos de la localidad.

Más allá de los argumentos económicos, Garbitania recomienda cambiar de sistema aduciendo que, hoy por hoy, Zarautz solo recicla el 35,9% de los residuos, frente al 80% que se consigue con la recogida selectiva.

Cómo Y para ello, plantea dos opciones: gestión directa del Ayuntamiento (que costaría 62.000 euros menos al año) o subcontratar el servicio. Cabe recordar que, actualmente, las empresas FCC y Serbi-tzu se encargan de recoger los residuos urbanos de la localidad, por lo que sería necesario revisar el contrato, vigente para los próximos diez años.

Se elija la fórmula que se elija, Garbitania solo recomienda el puerta a puerta para los núcleos urbanos, ya que considera que las zonas rurales son demasiado extensas para que el sistema fuera factible. Para estos lugares plantea tres puntos verdes o casetas para depositar las basuras. Una se ubicaría en el noreste (barrios Santa Bárbara y Urtzain), otro en el noroeste (Urtzain, Elkano, Abedaño, Argoin, Urteta y AItza) y el último, en el sur (Talaimendi, Asti y Aitza).

Además, al igual que en los demás municipios que utilizan el puerta a puerta, se construiría un punto de emergencia al que los vecinos podrían recurrir en el caso de no poder cumplir con el horario estipulado. La ubicación planteada sería el polígono Abendaño, con un costo de 25.200 euros.

Para el resto de vecinos que residen en el casco, Garbitania propone seguir el ejemplo de Hernani, Oiartzun, Usurbil y Antzuola: repartir cubos, instalar colgadores y elaborar un calendario. Así, la materia orgánica se recogería tres veces por semana; los envases ligeros, en dos ocasiones; y el papel y el rechazo, una vez. Los pañales y las compresas serían la excepción con recogidas diarias.

Decisión del pleno La decisión final de cambiar o no al puerta a puerta se adoptará en el Pleno municipal. El equipo de Gobierno ya ha mostrado su intención de hacerlo, pero necesitará el apoyo, de al menos otro grupo más, para sacar adelante la iniciativa.

Al igual que en los otros 33 municipios que apuestan por el puerta a puerta, tanto el PNV, como el PSE, presentarán mociones en contra de este sistema. Los jeltzales piden, además, que se consulte a la ciudadanía para conocer su opinión.